lunes, 25 de junio de 2007

¿O solo soy yo?

He llegado a un punto de mi vida en el que me he dado cuenta de que nada tiene sentido, de que no sé absolutamente nada, que todo es confuso y que hasta empiezo a creer que todo es un gran CoMpLoH en contra de mi generación para hacernos sentir cada día más estúpidos. (O aunque no lo sintamos, igual nos hacen más estúpidos.)
Y es que, todo ha cambiado en mi aburrida y tranquila vida, en todos los aspectos, sin previo aviso y sin un casco para resistir el madrazo.
De pronto comienzo a usar palabras que nunca (en mi sano juicio) usaría frente a mis padres. Otras de las cuales ni siquiera tengo una remota o minúscula idea de lo que significan en realidad. Ejemplos: fiaca, lacra, debrayar, munga, chosta, queque, etc. (ni poronga, ni moronga ni procrastinar) Ya saben, ¿no?
Algunos días odio al mundo, escucho música agresiva y veo el Exorcista. Otros siento melancolía, busco y bajo canciones que hablen de extrañar a alguien y veo Diario de una Pasión. Por supuesto también los hay en los que estoy de psicópata depresiva y canto puras canciones que hablen de tristeza, soledad y hasta suicidio y me siento a llorar frente a la ventana viendo caer las gotas de lluvia. (aunque ahora me entró la moda de verme llorar en el espejo O_o)
Luego están esos días en los que me invade la hiperactividad y el ocio. Entonces brinco, grito, canto y bailo (hasta lo que no me gusta), actúo con sarcasmo y burlas, molesto a la gente y luego llego a mi casa a comer en menos de una milésima de segundo para después salir a correr con mis perros como imbécil (cada quien corre como puede) toda la maldita tarde. (Bueno, por lo menos esos días, después de tanta actividad, duermo como soberana piedra. Cosa que no puedo hacer los demás días. Ah, porque resulta que además me volví vampiro (y vegetariana, porque ni tiempo tengo de chupar sangre), porque toda la mañana me caigo de sueño, toda la tarde duermo y en las noches estoy de fiesta, doy vueltas, veo la tele y luego veo el techo hasta que llega la hora de levantarse.)
Claro que no pueden faltar los días en que la diosa Hueva gobierna mi mente, cuerpo y alma. Esos días ni siquiera quiero mover la boca para emitir sonido. Incluso llega a darme hueva el hecho de tener tanta hueva. (¿O no?)
Y eso es solo una semana (de lunes a viernes, ¿eh? Faltarían sábado y domingo).
Ok, eso en cuanto al ánimo. Pero de pronto todas las letras de las canciones nos llegan. O ya todo se nos hace tierno (por más heavy metal que seamos) y nos volvemos lo que siempre temimos: unos patéticos y ridículos cursis.
O que sentimos que ya somos súper importantes en el mundo y nos creemos todos unos ciudadanos, hechos y derechos, que tenemos miles de oportunidades en la vida porque resulta que todos nosotros somos descendientes de la pantorrilla de Venus, que cargamos el mundo entero en nuestros hombros (y eso sin contar la mochila) y que el mundo no sería nada sin nosotros.

Vaya que somos idiotas.

Pero además, nos tragamos esa vil y ruin patraña de que podemos hacerlo todo, y por supuesto, ahí vamos de inteligentes a hacer cosas que ni sabíamos que existían o para lo que no fuimos hechos. Porque créeme, que si eres un baquetón que juega Zelda todo el día (Hey, no me malinterpreten, el juego está bien… mas no los huevones extremistas), pero claro que no vas a ser un experto en capoeira con un lavadero en vez de estómago al siguiente día, CORAZÓN. ¬¬ Vas a seguir con tus patéticas lonjas gelatinosas, ojos salidos dignos del record Guiness y cayos en los dedos de tanto jugar. Acepta la triste realidad.
Nos tienen atiborrados de mentiras y cursilerías, ah, porque no he terminado con las cursilerías. Ahora resulta que a todos nos encanta abrazarnos, apapacharnos, agarrarnos de la manita, jugar con nuestro cabello, hacernos cariñitos en el cuellito, ser solidarios, cuidarnos unos a otros, reírnos juntos de todas nuestras estupideces, defendernos de los malos….. en fin, ¿para qué sigo con algo que ya saben? Y esos solo son los amigos.
He llegado a la conclusión de que la única diferencia entre el concepto de “novios” y “amigos”, es que el área de los besos cambia de lugar y en algunos casos (ya avanzados, y disculpando la naca expresión), se incluye la cena de Pancho (OMFG*).
Lo que por cierto me recuerda, que ahora además de todo, es cuando más queremos estar en forma y super hot; y para variar, tambien es cuando más porquerías tragamos. (Y además tragamos todo el bendito día, como buenos marranos en los que nos hemos convertido).
Pues bien, con eso de que ahora todo mundo nos gusta, nuestro mundo es rosa y apesta a la vez y que no tenemos un equilibrio en lo absoluto, sino que todo es blanco y negro (osea, nos vamos a los extremos), he llegado a una sola y concreta conclusión:

Me duele la cabeza

Enserio me duele, porque descubrí que a pesar de filosofar tanto (jaja, claro… “filosofar”) la vida es absurda e inútil.
Creo que comparto esto con muchos, si no es que con todos, así que estarán de acuerdo conmigo, ¿no? ¿O sólo soy yo?

Pues si solo soy yo, me importa un bledo. Buenas noches.

* Expresión utilizada para indicar un gran asombramiento y/o sorpresa. Las siglas OMFG que en inglés significan Oh My Fuckin' Gott (no se utilizara la palabra God para evitar ofensas)

3 comentarios:

Serguei dijo...

Ah que contundente! Un gusto leerte de nuevo... creo que igual necesitamos ser criticos como ser apapachadores (y apapachados) pero sin ninguna pose ni borregada.

Pero si... la gente es tan complicada...

Swirlies dijo...

AMEN HERMANA

OREMOS EN UNION Y GOSPEL

Yuhuu dijo...

GUAAAAA, SOY HARTA IGNORANTE NI SABIA QUE VOLVISTE!!!